domingo, 30 de mayo de 2010

Plateado Amor

De sus rocas enroscadas escucho su cantar pausado, un cantar olvidado, que se convirtió en el susurro de la profundidad. Un susurro que sella nuestra entidad y nos devuelve la libertad. Poderoso movimiento que como ausencia extendida, como campana súbita, reparte el sonido del corazón. Se funde con llamas húmedas que queman el cielo, se funde con la luz del viento.
Crecen amapolas verdes en un campo de lágrimas, amapolas de espuma verde, amapolas aventuradas y veloces que esconden hijos entre sus extremidades.
No busques razón para su furia, pues sus garras atraviesan el alma, la rabia del dominio, la esperanza de expansión, pues es un amor incomprendido. Arrancado le es su tesoro, arrancado le es su amor, y allí se estira y arde en la más alta hoguera, en la más profunda batalla.

Poned la boca en su corazón, allí donde su corazón polvoriento golpea, sonará con un ruido oscuro de tren con sueño. Soplad en sus alas y echarle a volar que ellas le hacen pensar. Plateado corazón helado que caminas sin rumbo, plateado es el día en el que naciste, no llores tu soledad enjaulada, no llores por tu rabia y tu desgracia; plateado como el sol naciente, arderan tus amapolas de espuma en las llamas húmedas, arderan en tu corazón enamorado de hijos perdidos, no temas…pues frente a una nueva noche, soplaras en mi corazón de miedo frío, soplaras en la sangre sola de mi corazón, soplaras en su movimiento de paloma con llamas, sonarás tus negras sílabas de sangre, crecerán tus incesantes aguas rojas, y sonarán, sonarán a sombras, sonarán como la muerte, llamará como un tubo lleno de viento o llanto, o una botella echando espanto a borbotones.

Así es, y los relámpagos cubrirían tus trenzas, la lluvia entraría por tus ojos abiertos a preparar el llanto que sordamente encierras, y las alas negras se expandirán.

Guardas demonios en tu profundidad, demonios de agua en tu inmensidad, no arrincones tus pensamientos y devuélvelos, no amarres tu destino, ellos ya están muertos. Aquellos que dejan una promesa y no vuelven nunca más. Déjales respirar, aquellos que guardan su corazón en la tierra y su alma en el mar.

…Una noche se acuestan con la muerte en el lecho del mar.

martes, 13 de abril de 2010

Niña

La niña, niña...nunca de nadie, dueña de todo, de lo imposible, de lo irreal. No me hago a la idea de no volver a verte, y es que tenerte ha sido todo mi querer. Desde este día mi corazón se envenenó de melancolía, ausencia de mi niña querida. Mi amor hacia ti es energía, es química, física, es una espiral de locura de colores.

Mañana será otro día, la melancolía se irá, pero hoy la tengo agarrada y no la voy a soltar. Mi mirada se encuentra envuelta en una lejanía vacía, ojos de melancolía miran el reino de lo insivible con la misma intensidad que haría tu presencia.
Soy un genio con alas que no voy a desplegar, con una llave que no abrirá,...

Tanto la quería...que esta noche volveré a esconder mi corazón en un cajón a modo de caparazón. Daré mi corazón como alimento, porque tanto dolor se agrupa en mi costado
que por doler me duele hasta el aliento. Mi herida es profunda, y dolorosa; el tiempo no sabrá cámo curarla, no hay consuelo para tanta ausencia. Temprano madrugó la madrugada, temprano levantó la muerte el vuelo. Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida, un empujón brutal me ha derribado.

Ya no hay días para pedir perdón, ya no hay días para besos de despedida. Niña de ojos negros, una niña de ojos negros que el viento se los llevó, cubriendo de lágrimas mi último adiós.
Siento tu ausencia como un eclipse de sol...Nunca vas a saber cómo me siento, nadie va a adivinar cómo te recuerdo. ¡Qué no daría yo por ver tu mirada! Los días pasan, y solo las luces del alba alumbran mi recuerdo...¡qué no daría yo por ver tu mirada! Te necesito tanto como a la luz del sol, como al agua del mar, tu eres mi dulce y cálida primavera. Tú eres mi bella primavera y por ti levantaré una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes, sedienta de catástrofes y hambrienta.

Ahora que ya no estás, ahora, ocupas el mejor lugar de todos mis pensamientos, y es que vives en mi corazón, haciéndome vivir, tú eres el rayo que no cesa.

"Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorada.

A las aladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañera del alma, compañera."

Pero el camino se ensancha y ya veo el final, como el delta de tu río que se abre a mi mar.

lunes, 18 de enero de 2010

Decepcionada

Está fuera de nuestro alcance, ni siquiera la imaginación podría llegar hasta ella. ¿Qué coño hacemos? ¿En qué creemos? ¿En la justicia? ¿libertad? ¿humildad? ¿perdón? ¿amor?. No. No creo en eso. No sé en qué creer, ni en qué pensar. Solo sé que vivimos en un mundo virtual en el que la madre superiora es el azar. Que jodida suerte hemos tenido de estar donde estamos. Que insignificante es nuestra desgracia. No cambiaremos nada lamentándonos, ni consolándonos,...el día que seamos conscientes de lo mierda que es esto, quizás, seremos suficientemente racionales como para dar un golpe sobre la mesa. Ya estamos hartos de gobiernos corruptos, libertades ficticias, abuso del poder nunca otorgado, políticos de palabrería...

Mientras tanto seguiremos viendo en el telediario que todavía hay gente en Haití sepultada, sin comida ni agua; seguiremos viendo los 100 millones de dólares dados hace tiempo al Gobierno hatiano y que se debieron de quedar en algún palacete; seguiremos viendo cómo el Papa profiere mentiras que sangran de su boca diciendo a miles de africanos que el condón es pecado, mientras siguen muriendo millones de personas por el SIDA. Y seguiremos viendo lo mierda que es todo.

Que guay tenemos tatuajes y piercings, nos emborrachamos todos los findes, y seguimos pidiendo a papá 20 pavos. Joder que bien, estamos de puta madre. No hay palabras decorativas que embellezcan esto. Porque esto es la ruda realidad, esto es lo que viven millones de personas.
Siento decpción. Vamos de modernos y ecologistas que es lo que se lleva ahora, vamos de hippies, y no nos damos cuenta de que nuestro mundo industrializado es una verdadera mierda, una farsa, donde la estupidez sobrepasa límites insospechados.

Y es que se me encoge el corazón cada vez que veo el telediario, no somos culpables de esa tragedia, pero somos responsables de esto cambie, tenemos los medios de los que ellos carecen. Tenemos voz, y por lo tanto, el poder.
Si de verdad esto es lo que me espera ver,...no creere en la justicia ni en la política, y todo lo que he escrito y leido antes, valdrá menos de lo que vale esta mierda de mundo.

lunes, 21 de diciembre de 2009

En la más alta cúspide

No sé dónde comienza, no sé dónde duerme, ni dónde se despierta; no sé si es racional o sentimental, no sé ni si quiera de qué clase es,...Lo que sí sé es dónde afecta, qué me hace sentir,...y también sé dónde termina.
El dolor no nos hace ni mejores ni peores, nos hace iguales, nos recuerda que nuestra eternidad acaba donde comienza nuestros sueños e ilusiones, nos devuelve a un lugar sombrío, nos muestra la más oscura claridad, y gracias a él somos felices.
Impone su fuerza en el corazón, dejándonos un vacío emocional, que nos ahoga por dentro, volviéndonos transparentes. Nos anuda la garganta y nos presiona los pulmones...Cuando su grito crece exponecialmente, se convierte en veneno esfervescente que recorre el cuerpo, hasta llegar a mi boca,...y es en ese momento en el que tu voz se convierte en un susurro imperceptible, eres invisible.

Te humilla, y te castiga, y crece con tu tristeza e impotencia...pero, no sabe que termina. Todo termina, si nuestro cuerpo físico termina, el dolor tambien, y el amor, y la amistad, y la ganas de vivir, todo termina, nada es eterno.

El declive del dolor comienza en su ansia de poder, en sus ganas de dominar y de expandirse por todos los rincones de nuestro cuerpo, el dolor termina con la primera de nuestras lágrimas. Ellas son el último rastro de dolor en nosotros. Pero solo terminará el día en el que la lágrima pare en la comisura de nuestros labios, en el momento justo en el que esbozamos nuestra sonrisa, en ese momento todo se anula. Se termina.

No somos eternos, no. Un día espiraremos hacia...¿quién sabe donde?, un día todos recorreremos el mismo camino, ese día será una nueva aventura, porque no somos eternos, pero somos demasiado especiales como para acabar aquí.
Si nuestra vida se rige por la mortalidad, no debemos guardar dolor, ni rencor ni odio, no estamos aquí para sufrir, si no para vivir y ser felices. El dolor es una parte más de nuestra existencia, una parte insignificante y absurda, guardémoslos en una caja pequeña y olvidémosla.

Aquellos que profieren llantos desconsolados que estrangulan sus gargantas, son aquellos que viven abrazados al dolor, la tristeza y la soledad. Pero resurgiran como resurgían los guerreros, aunque nos derrumbemos, nos levantaremos y creceremos, porque el dolor no es eterno.

Volamos sobre la más alta cúspide, y jamás caeremos, nuestra felicidad se expanderá, como se expanden los pájaros al vuelo, y jamás caeremos. Solo nosotros mismos aprendemos a volar, a erguirnos, y a seguir nuestro viento que va entre el mar y el cielo.

"El odio es un lastre. La vida es demasiado corta para estar siempre cabreado. Si bien la pasión puede tensar nuestros lazos de afecto, jamás debes romperlos. Las místicas cuerdas del recuerdo resonarán cuando vuelva a sentir el tacto del buen ángel que llevamos dentro."

martes, 15 de diciembre de 2009

My Life


Sé que no podria vivir sin ella...

Podemos escucharla con los ojos cerrados, y nos encontraremos en otro mundo, en NUESTRO mundo, en el que solo vale la imaginación...Mi mundo se construye en una base de tambores que rigen los latidos del corazon, mis pasos los condicionan el retumbar del bajo, el sonido de las flautas golpean mi cara como si viento se tratara, el piano acompasa mis pensamientos y razonamientos, y el violin mis únicos deseos. Y cuando a todo esto se suma, el sonido de una eléctrica guitarra, de la yema de mis dedos salen chispas de colores...

En el lugar donde nunca pasa nada, el viento se reivindica y las ramas se agitan,...pero nunca pasa nada, donde las horas pasan...porque cuando la escucho ardo en una hoguera, y me quemo, y me abraso, y noto como el frío recorre mi cuerpo, pero ardo con la gasolina que poseo yo misma...porque cuando la escucho ardo como la última vez, y me elevo,...y volar, y...volar. Es un éxtasis musical que me devuelve a mi identidad, a lo originario, a las raíces primeras de mi existencia, porque en mi origen solo existe el ritmo puro de mi corazón y la corriente orgánica de la vida.

No necesito drogas que me hagan sentirme como ella, no hay ninguna más dulce que mi propio éxtasis, porque no solo la escucho, también la veo, desde mi introducción al delirio noto como el fuego explota en mi corazón y las lágrimas brotan de mis ojos...

Ella, solo ella, hace elevar mi alma por encima de sí misma, creando una región donde, libre de toda ansiedad, pueda refugiarse sin obstáculos en el puro sentimiento de sí misma. Ella es el eco del mundo invisible, de mi mundo real, es mi mayor reivindicación y la única revelación, es la mayor de mis pasiones, me envuelvo con ella, me empapo de su esencia, y todavía me quedo sin aliento...

No nace de la observación de las hojas de los árboles o la ciencia del suelo, crece como semilla en la oscuridad, alimentándose de los vacíos que los excesos dejó en mi corazón.
Ya no necesito oírla para escucharla, se apoderó de mis pensamientos mucho antes de existir, porque si me abrís las entrañas solo encontrareis notas musicales que hablan de mi vida; si muero escuchándote será la muerte más dulce...

Y así gira mi mundo, viviendo en un sin razón musical, viviendo agarrada a mi propio declive, a mi propio vicio, porque un orgasmo nos estremece el cuerpo, pero LA MÚSICA, el éxtasis musical, extremece mi mundo real, mi corazón, mi cuerpo físico, mi alma, y me devuelve al origen, me devuelve a un viaje del que algún día espero no volver.

Coge un orgasmo multiplícalo por mil y ni siquiera estarás cerca de lo que es para mi la MÚSICA.

lunes, 7 de diciembre de 2009

Cerrado por derribo



Porque al miedo hay que mirarle siempre a la cara

Derribados, una y otra vez somos derribados, y caemos fuertemente contra el suelo, y lloramos nuestra desgracia y nuestra suerte, pero siempre nos levantamos. Nos levantamos porque seguimos queriendo algo con ilusión, porque seguimos luchando cada día, porque SOMOS FUERTES.

No creo en alguien superior que guía mi vida, no creo ni en el cielo ni en el infierno, creo en nosotros, en nuestra inteligencia, en nuestra fuerza, en nuestros sentimientos...yo creo en mi vida, en mi energía, en mi misma.
¿Miedo?...¿a qué?, ¿al dolor?, ¿a la muerte?, ¿miedo por haber hecho mal?, ¿miedo por perder a alguien querido?...el miedo no es más que un preámbulo de nuestra valentía, unos consiguen alzarse con ella, otros se sumen en su propio terror.
Creer que nuestra desgracia se ha dado porque "Dios" escribe nuestro destino, o que somos muñecos de un ser superior que elige nuestros caminos, nuestra vida y nuestra hora de la muerte...¿creer?...eso no es creer, es sumisión.

Antonio Machado dijo una vez: "Caminante no hay camino, se hace camino al andar".
Nosotros hacemos nuestro camino, con nuestras elecciones, porque somos libres. No me enseñaron a creer, ni a tener fe en otra persona que no soy yo, porque..."Desde mi libertad soy fuerte porque soy volcán. Nunca me enseñaron a volar, pero el vuelo debo alzar".

"Quizá la clave para ser realmente libre sea: Reír cuando puedas y llorar cuando lo necesites. Ser honesto con uno mismo, centrarse en lo importante y olvidarse del ruido. No obcecarse con los objetivos, tratar de relajarse y vivir algo más tranquilo.

Hoy busco dormir a gusto. No suena muy ambicioso, pero créeme, es mucho.

No pienso rendirme ante ningún problema. Confío en mí y soy capaz de vencer lo que sea. Volveré a caer millones de veces, pero siempre volveré a erguirme, porque me di cuenta de que quizá la clave para ser realmente libre sea: Reír cuando puedas y llorar cuando lo necesites."


Porque prefiero arder a ir apagándome lentamente, porque no existe más miedo que el que se almacena en mi costado, porque con ese miedo se me curan las heridas, porque me derrumbaré pero sé que me levantaré. Porque no tengo miedo a mi destino y mi dicha, porque llegará el día en el que miraré al miedo de frente, le miraré a la cara, porque ese día le enterraré y sonreiré, porque ese día ganaré...pero mientras tanto viviré.

"No temo ni al dolor ni a la muerte.
Temo a una jaula, a empuñar sus barrotes hasta que la edad y la costumbre los acepten, y toda opción al valor ceda al recuerdo y al deseo."


Hoy está cerrado por derribo, mañana estará cerrado por reconstrucción.

viernes, 27 de noviembre de 2009

"Adiós, hermanos, camaradas y amigos, Despedidme del sol y de los trigos"


"Recordar a Miguel Hernández que desapareció en la oscuridad y recordarlo a plena luz, es un deber de España, un deber de amor. Pocos poetas tan generosos y luminosos como el muchachón de Orihuela cuya estatua se levantará algún día entre los azahares de su dormida tierra. No tenía Miguel la luz cenital del Sur como los poetas rectilíneos de Andalucía sino una luz de tierra, de mañana pedregosa, luz espesa de panal despertando. Con esta materia dura como el oro, viva como la sangre, trazó su poesía duradera. ¡Y éste fue el hombre que aquel momento de España desterró a la sombra! ¡Nos toca ahora y siempre sacarlo de su cárcel mortal, iluminarlo con su valentía y su martirio, enseñarlo como ejemplo de corazón purísimo! ¡Darle la luz! ¡Dársela a golpes de recuerdo, a paletadas de claridad que lo revelen, arcángel de una gloria terrestre que cayó en la noche armado con la espada de la luz!"- Pablo Neruda

Sin dudarlo, mi escritor favorito, aquel que con una palabra dice todas, y que con todas ellas te hace sentir algo especial. No tengo palabras para expresar lo que siento cada vez que le leo, es calmado, es poeta, él es poesía, a cada palabra que escribe de una estela de fuerza inquebrantable y desaliento, es justo, es...Miguel Hernández.

El día en que escriba una frase, un cuarto tan buena como las tuyas me sentiré más que completa y satisfecha, porque para mi no hay nadie mejor, que mi maestro de las letras.
El título que lleva mi blog, fueron sus últimas palabras, en los muros de la cárcel de Alicante, poco antes de morir. Y le dedico esta entrada a él, porque el 30 de octubre de 2010 se celebra el cien aniversario de su nacimiento. Un día él le dedicó un poema a un gran amigo suyo fallecido, hoy te dedico tu poema a ti...

Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.

Alimentando lluvias, caracolas
y órganos mi dolor sin instrumento.
a las desalentadas amapolas

daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado,
que por doler me duele hasta el aliento.

Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.

No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.

Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.

Temprano levantó la muerte el vuelo,
temprano madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo.

No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.

En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofes y hambrienta.

Quiero escarbar la tierra con los dientes,
quiero apartar la tierra parte a parte
a dentelladas secas y calientes.

Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte.

Volverás a mi huerto y a mi higuera:
por los altos andamios de las flores
pajareará tu alma colmenera

de angelicales ceras y labores.
Volverás al arrullo de las rejas
de los enamorados labradores.

Alegrarás la sombra de mis cejas,
y tu sangre se irán a cada lado
disputando tu novia y las abejas.

Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.

A las aladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.